Ayer hice mi lectura en el Anaïs, y sólo vino UN fan de este blog (gracias, Adri). MUY mal xD Es broma, yo sé que a la mayoría os pilla lejos el asunto, así que os perdono.
La cosa fue bastante bien, aunque yo estaba nerviosilla, porque había un montón de gente. Antes de mí leyeron un italiano, un señor y una chica vestida de ángel (lo que hay que ver). No os puedo dar mi opinión sobre sus textos porque estaba demasiado preocupada intentando no sucumbir al pánico.
Aguanté hasta que me tocó sin salir corriendo, bebiendo cerveza para envalentonarme, y cuando me quise dar cuenta ahí estaba yo, toda insignificante, en un banquito tipo el Club de la Comedia y con el micro frente a mí. Dije algo así como "bueno este... es mi primera lectura, espero no hacerlo demasiado mal y agradezco a César la oportunidad de compartir esto con vosotros" (intento de congraciarme con el público). Después me dije a mí misma: "Vamos, Marina, es tu cuento, y de cómo lo leas dependerá si le llega o no a la gente, y tiene que llegarle, ¡¡TIENE QUE LLEGARLE!!". Así que saqué mi mejor voz de lectora, mis años dando teatro en el colegio y mi reserva de emergencia de valor y arranqué a leer.
Los que me oyeron dicen que estuve muy tranquilita y bien, que no me tembló la voz ni nada (viva yo). En general, quedé bastante contenta con el resultado, aunque ahora mismo ni siquiera recuerdo si me aplaudieron (imagino que sí, pero no me acuerdo del momento, en serio).
Después me sentí muy escritora famosa (bueno, dejémoslo en escritora a secas) hablando con la gente que me comentaba el relato y me decía que le había gustado mucho. Estoy muy contenta y con muchas ganas de seguir escribiendo y de mejorar :)
Por cierto, no os preocupéis que la tercera parte de "Hector y Musa" está al llegar. Pero paciencia, porfa, paciencia.
Gracias por vuestro apoyo y besos para todos.
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8 comments:
Enhorabuena! Normal que te sintieras como escritora famosa; tenías que haber llevado copias del cuento y firmarlas a la salida, para que el efecto fuera completo. Y unas fotos, para que no se olvidaran de tu cara.
Hasta que no te leí, no se me había ocurrido un bar como posible escenario de lectura. Mira que hay sitios en el mundo donde nos podemos colar... La cosa es echarle valor.
Yo hubiera ido a verte, pero me pilla un poco a desmano (California y Granada no comparten ni mar, je, je).
Felicidades, y espero impaciente el final de tu cuento.
¿Cómo que sólo un fan? No vuelvo a ofrecerte mi apoyo incondicinal, la próxima vez me quedo en casa haciéndole mimitos a la gata, ea!! xDDDD
Pero Ald, cariño, tú no eres fan, tú eres amiga :) Que no es lo mismo.
Besitos y MUCHAS GRACIAS, me sirvió de mucho tu apoyo.
Gracias a ti también, Ruth... lo de repartir copias me parecía excesivo, pero un par de ellas sí que llevaré la próxima vez, que la que tenía me la pidieron y me quedé sin ninguna. Besines.
Ya, pero yo también quiero ser grupi! :D
Y fotos hay, que un señor anónimo nos pidió las direcciones de correo para enviarnos cosas... ^^
Ardiendo en los fuegos del horror, se va aprendiendo...
Felicidades, Marina.
Ya puedes decir que has estado ensayando para las futuras ruedas de prensa en las presentaciones de tus novelas.
Un abrazo.
viva viva viva
Mejor aprovechar y poner una parada de libros. Si lo hacen los "grandes", qué más da si lo hacen los "pequeños". Acuérdate de la famosa frase: "Yo he venido a hablar de mi libro"...
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